¿Tienes ganas de viajar a Turquía? Estás en el lugar indicado porque en esta guía te contaré todo lo que necesitas saber antes de planear tu primer viaje a Turquía.
Turquía, un país que fusiona a la perfección los mundos antiguos y modernos, se ha convertido en uno de mis destinos favoritos. Durante dos semanas, exploré este fascinante país en un viaje grupal lleno de aventuras, risas y descubrimientos inolvidables.
Cuando decidí viajar a Turquía por primera vez, no sabía realmente qué esperar. Había escuchado tantas cosas sobre Estambul, Capadocia y las playas del Mediterráneo, pero nada se compara con vivirlo en persona.
Quiero compartir contigo todo lo que aprendí durante mi viaje. Desde los lugares que no puedes perderte hasta consejos prácticos para moverte por el país, mi objetivo es ayudarte a planificar una aventura que sea tan inolvidable como la mía.
Dónde está ubicado Turquía
Comencemos por su ubicación, lo cual es bastante interesante, ya que es un país que se extiende entre dos continentes: Europa y Asia. Imagina una tierra que conecta dos mundos diferentes. Turquía se encuentra en la intersección de estos dos continentes, con su parte europea al noroeste y su vasta extensión asiática al este.
La ciudad de Estambul, que se encuentra justo en el estrecho del Bósforo, es el punto donde Europa y Asia se encuentran y se entrelazan.
Al oeste, Turquía está bañada por el mar Egeo y el mar de Mármara, mientras que al sur tiene una extensa costa mediterránea. Al este, limita con países como Armenia, Irán y Azerbaiyán, mientras que al norte, el mar Negro separa el país de las naciones de Europa del Este.
Esta ubicación estratégica le confiere una historia rica y diversa, llena de influencias de distintas culturas a lo largo de los siglos. Así que, cuando visites Turquía, estás realmente explorando un cruce de caminos entre el oriente y el occidente, un lugar donde las tradiciones antiguas se encuentran con la modernidad en un contexto geográfico verdaderamente único.
Cómo llegar a Turquía
Viajar a Turquía es más fácil de lo que podrías pensar y hay varias opciones según tu punto de partida y preferencias. Aquí te cuento cómo puedes hacerlo, basándome en mi experiencia:
En avión
Esta es la forma más común y conveniente de llegar a Turquía. La mayoría de los viajeros internacionales llegan al Aeropuerto de Estambul (IST), que es uno de los más grandes y concurridos del mundo. Desde allí, puedes tomar un vuelo doméstico a otras ciudades importantes como Capadocia, Antalya o Izmir.
También hay otros aeropuertos internacionales importantes en Ankara, la capital, y en otras ciudades grandes. Los vuelos desde Europa suelen ser bastante cortos, generalmente de 2 a 4 horas, mientras que los vuelos desde América del Norte pueden durar entre 10 y 12 horas, con una escala en ciudades europeas. Las aerolíneas turcas, como Turkish Airlines, ofrecen una amplia red de conexiones internacionales.
En tren
Si ya estás en Europa y buscas una experiencia más pintoresca, puedes considerar el tren. La línea de tren internacional de alta velocidad que conecta Sofía (Bulgaria) con Estambul es una opción interesante. Aunque el viaje es más largo y puede durar alrededor de 12 horas, te permitirá disfrutar del paisaje en el camino.
En autobús o carro particular
Para los viajeros que prefieren una opción más económica, los autobuses internacionales son una alternativa. Empresas como FlixBus ofrecen rutas desde varias ciudades europeas a Estambul y otras ciudades turcas. Es una opción más lenta pero también más asequible.
Si te sientes aventurero y estás en Europa, puedes considerar conducir hasta Turquía. El viaje en carro desde países vecinos como Grecia o Bulgaria es bastante factible. Solo asegúrate de estar preparado para los requisitos de visado y de llevar todos los documentos necesarios.
En barco
Aunque no es la opción más común, también puedes viajar a Turquía por mar. Hay ferris que conectan Turquía con varias islas griegas y con el puerto de Haifa en Israel. Estos viajes son menos frecuentes, pero ofrecen una experiencia única para quienes buscan una forma diferente de llegar.
Qué idioma se habla en Turquía
En Turquía, el idioma oficial es el turco. Es un idioma fascinante y bastante diferente del español o del inglés, ya que pertenece a la familia de lenguas túrquicas.
El turco es una lengua aglutinante, lo que significa que las palabras se forman mediante la adición de sufijos. Esto puede parecer complicado al principio, pero es parte de lo que hace que el idioma sea tan único y bello.
La escritura en turco utiliza el alfabeto latino desde 1928, lo que facilita la lectura para quienes estamos acostumbrados a este alfabeto.
Frases útiles:
Aunque muchos turcos, especialmente en las áreas turísticas, hablan inglés, es siempre una buena idea aprender algunas frases básicas en turco para mostrar cortesía y facilitar la comunicación. Aquí tienes algunas que pueden ser útiles:
- Hola: Merhaba
- Adiós: Hoşça kal (informal) / Güle güle (formal)
- Por favor: Lütfen
- Gracias: Teşekkür ederim / Teşekkürler (más informal)
- Sí: Evet
- No: Hayır / Yok (más informal)
- Perdón / Disculpa: Özür dilerim
- ¿Cuánto cuesta?: Ne kadar?
- Buen provecho: Afiyet olsun
Inglés en Turquía
En las principales ciudades como Estambul, Ankara, Izmir y en los destinos turísticos populares como Capadocia y Antalya, encontrarás que muchas personas, especialmente en la industria del turismo, hablan inglés. S
in embargo, en áreas rurales o menos turísticas, el conocimiento del inglés puede ser más limitado. Tener una aplicación de traducción en tu teléfono puede ser muy útil.
Otros idiomas
Además del turco, hay varias minorías en Turquía que hablan otros idiomas, como el kurdo, el árabe y el armenio. Sin embargo, el turco sigue siendo el idioma predominante y el que se usa en la educación y en la mayoría de los medios de comunicación.
Cuál es la moneda de Turquía
La moneda oficial de Turquía es la lira turca, abreviada como TRY o simplemente TL. Denominaciones: La lira turca se divide en 100 kurus. Los billetes están disponibles en denominaciones de 5, 10, 20, 50, 100 y 200 liras, mientras que las monedas vienen en 1, 5, 10, 25 y 50 kurus, así como en 1 lira.
La lira turca tiene una rica historia que refleja los cambios en la economía y la política de Turquía. Introducida por primera vez en 1844 durante el Imperio Otomano, la lira reemplazó al kurus. Con la fundación de la República de Turquía en 1923, la lira se convirtió en la moneda oficial del país.
Durante la segunda mitad del siglo XX, Turquía enfrentó alta inflación, lo que llevó a una significativa devaluación de la lira. En 2005, se introdujo la «nueva lira turca» para estabilizar la economía, eliminando seis ceros de la antigua moneda. En 2009, se eliminó el adjetivo «nueva», volviendo a llamarse simplemente «lira turca».
Ciudades que no puedes perder al viajar a Turquía
Estambul
Estambul es la joya de Turquía, donde Europa y Asia se encuentran. Imagina caminar por las calles y encontrarte con la majestuosa Santa Sofía, una maravilla arquitectónica que ha sido tanto iglesia como mezquita. Luego, te encuentras con la Mezquita Azul, justo enfrente, con sus impresionantes cúpulas y seis minaretes.
No te puedes perder el Palacio de Topkapi, donde los sultanes otomanos solían vivir. Y por supuesto, una visita al Gran Bazar es como un viaje en el tiempo, con sus infinitas tiendas llenas de especias, joyas y textiles.
Capadocia
Capadocia es un lugar de ensueño, famoso por sus formaciones rocosas únicas llamadas «chimeneas de hadas». Aquí, una de las experiencias más memorables es un paseo en globo aerostático al amanecer, sobrevolando este paisaje surrealista. También puedes explorar las antiguas ciudades subterráneas como Derinkuyu, que te harán sentir como si estuvieras en una película de aventuras.
Izmir
Izmir, en la costa del mar Egeo, es una ciudad vibrante y moderna. Pasear por el paseo marítimo de Kordonboyu al atardecer es una experiencia mágica. El Agora de Esmirna y el histórico ascensor Asansör te llevarán a descubrir la rica historia de la ciudad. Además, Izmir es conocida por su excelente cocina, así que prepárate para disfrutar de deliciosos platos de mariscos.
Antalya
Antalya es la puerta de entrada a la Riviera Turca, famosa por sus playas de arena blanca y aguas cristalinas. En la ciudad vieja de Kaleiçi, te perderás en sus callejuelas empedradas llenas de tiendas y restaurantes encantadores. Las cascadas Düden son un espectáculo natural imperdible, y la playa de Konyaaltı es perfecta para relajarse bajo el sol.
Ankara
Ankara, la capital de Turquía, puede no ser tan conocida como Estambul, pero tiene su propio encanto. En Ankara se encuentra el Mausoleo de Atatürk que es un lugar de gran importancia histórica, y el Museo de las Civilizaciones de Anatolia que ofrece una fascinante mirada a la rica historia del país. También encontrarás el Castillo de Ankara que ofrece unas vistas panorámicas increíbles de la ciudad.
Dónde alojarse en Turquía
Elegir el lugar ideal para alojarse en Turquía depende mucho de lo que busques en tu viaje. A continuación, te comparto algunas de mis recomendaciones basadas en mi experiencia como viajera nómada.
Alojarse en Estambul
Si es tu primera vez en Turquía, Estambul es una parada obligatoria. La ciudad es una mezcla fascinante de oriente y occidente, historia y modernidad. Para sentirte en el corazón de todo, recomiendo alojarte enla zona del Sultanahmet, el barrio donde se encuentran Santa Sofía, la Mezquita Azul y el Palacio de Topkapi.
Aquí, puedes encontrar opciones de alojamiento desde $50 USD por noche en hoteles boutique encantadores, hasta $150 USD en hoteles de lujo.
Si prefieres un ambiente más moderno y europeo, el barrio de Beyoğlu es tu mejor apuesta. Aquí, en áreas como Taksim y Karaköy, los alojamientos van desde acogedores hostales por $20 USD la noche, hasta elegantes hoteles de diseño que rondan los $80 USD por noche.
Alojarse en Capadocia
Para una experiencia mágica en Capadocia, te sugiero quedarte en Göreme. Es el punto de partida ideal para los paseos en globo aerostático y las exploraciones de las chimeneas de hadas. Alojarse en uno de los famosos hoteles cueva es una experiencia única; los precios varían entre $40 USD por una habitación sencilla hasta $200 USD por una suite con vistas impresionantes, hay para todos los gustos y presupuestos.
Alojarse en Antalya
Si buscas sol y playa, Antalya es el lugar ideal. La zona de Kaleiçi, la ciudad vieja, es perfecta si te gustan los alojamientos con carácter histórico. Aquí, puedes encontrar pensiones y hoteles boutique por alrededor de $50-100 USD por noche. Si prefieres un resort todo incluido con acceso directo a la playa, las opciones en Lara Beach son entre $150 y $300 USD por noche.
En general, Turquía ofrece muchas opciones de alojamiento que se ajustan a diferentes presupuestos y preferencias. Desde lujosos hoteles hasta acogedoras pensiones, siempre encontrarás un lugar que te haga sentir como en casa, los turcos en general son muy familiares y carismáticos.
Opciones de transporte en Turquía
Personalmente creo que Turquía tiene uno de los mejores sistemas de transporte público del mundo. Está muy bien conectado y algo que me voló la cabeza fue que si estás en Estambul, basicamente puedes andar en ferry todos los días si te toca ir del lado asiatico al lado de europa o viceversa mientras te relajas con la vista del mar por el estrecho del bosforo.
Es una locura. Moverse por Turquía es una experiencia en sí misma, y hay varias opciones dependiendo de tu itinerario y presupuesto. Aquí te comparto algunas recomendaciones basadas en mi experiencia viajando por este fascinante país.
Transporte público en las ciudades
Las principales ciudades turcas tienen sistemas de transporte público eficientes y económicos. En Estambul, puedes moverte fácilmente en tranvía, metro, autobuses y ferris.
Una tarjeta de transporte (Istanbulkart) cuesta alrededor de $1 USD y puedes recargarla según tus necesidades; cada viaje cuesta aproximadamente $0.50-1 USD. En Ankara, Izmir y otras ciudades grandes, también encontrarás sistemas de metro y autobuses bien desarrollados.
Autobuses
Los autobuses en Turquía son cómodos, económicos y llegan a casi cualquier rincón del país. Las compañías más populares incluyen Metro Turizm, Pamukkale Turizm y Kamil Koç. Los autobuses de larga distancia están equipados con asientos reclinables, aire acondicionado y a veces incluso servicio de comida.
Un trayecto de Estambul a Antalya, por ejemplo, puede costar alrededor de $20-30 USD y dura aproximadamente 12 horas. Si no te importa viajar de noche, los autobuses nocturnos son una excelente manera de ahorrar en alojamiento.
Transporte en ferry en Estambul
Una de las maneras más pintorescas y auténticas de moverse por Estambul es utilizando el sistema de ferrys. Estos ferrys públicos, operados por Şehir Hatları, conectan las partes europeas y asiáticas de la ciudad, ofreciendo vistas espectaculares del Bósforo, la Torre de la Doncella y la línea de costa histórica.
Hay varias rutas disponibles, y una de las más populares es la que va desde Eminönü (en la parte europea) hasta Üsküdar o Kadıköy (en la parte asiática). El trayecto dura aproximadamente 20-30 minutos y cuesta alrededor de $1 USD con la Istanbulkart, la tarjeta de transporte recargable que se utiliza para autobuses, tranvías y metros.
Otra ruta interesante es la que te lleva desde Karaköy a Kadıköy, ofreciendo una perspectiva diferente de la ciudad. Los ferrys son puntuales, cómodos y funcionan con bastante frecuencia, lo que los convierte en una opción conveniente tanto para locales como para turistas. Además, durante el trayecto, puedes disfrutar de un té turco o un simit (rosquilla de sésamo) que se venden a bordo.
Trenes en Turquía
El sistema ferroviario en Turquía es bastante bueno, aunque no cubre todo el país. Los trenes de alta velocidad (YHT) conectan Estambul con ciudades como Ankara, Eskişehir y Konya.
Un billete de tren de alta velocidad de Estambul a Ankara cuesta alrededor de $15-30 USD y el viaje dura unas 4-5 horas. Es una forma cómoda y relajante de ver el paisaje turco mientras te desplazas entre ciudades.
Otra opción interesante es el tren Marmaray, una línea ferroviaria que conecta el lado europeo y el lado asiático de Estambul, pasando por un túnel bajo el Bósforo. Esta línea va desde Halkalı en el lado europeo hasta Gebze en el lado asiático, cubriendo una distancia de aproximadamente 76 km.
Es una opción fantástica para cruzar el Bósforo rápidamente y cuesta alrededor de $0.50-1 USD por trayecto, dependiendo de la distancia.
Vuelos internos
Para recorrer largas distancias en poco tiempo, los vuelos internos son la mejor opción. Las aerolíneas como Turkish Airlines, Pegasus y AnadoluJet ofrecen vuelos frecuentes entre las principales ciudades.
Por ejemplo, un vuelo de Estambul a Capadocia (Aeropuerto de Nevşehir o Kayseri) puede costar entre $30 y $70 USD si reservas con antelación. Es una manera eficiente de maximizar tu tiempo, especialmente si tienes un itinerario apretado.
Taxis y servicios de ridesharing
Los taxis son otra opción, pero es importante que te asegures de que el taxímetro esté encendido para evitar sorpresas. Lamentablemente, es posible que te encuentres con taxistas que quieran estafarte si no tienes cuidado con el taximetro.
Las tarifas de inicio son generalmente bajas, alrededor de $0.50 USD, y luego unos $0.30 USD por kilómetro. Para mayor seguridad y conveniencia, puedes usar aplicaciones de ridesharing como BiTaksi o Uber, que están disponibles en las principales ciudades.
Tarjeta Istanbul Card
La Istanbul Card es la tarjeta de transporte recargable esencial para moverte por Estambul de manera eficiente y económica. Puedes conseguirla fácilmente en varios puntos de la ciudad.
Puedes comprar la Istanbulkart en:
- Máquinas expendedoras automáticas ubicadas en las estaciones de metro, tranvía, y algunos puntos de autobús.
- Kioscos de venta (büfe) y tiendas de conveniencia cercanas a las estaciones de transporte público.
El costo inicial de la Istanbulkart es de aproximadamente 150 TL (unos 4 USD), que incluye una cantidad de crédito inicial para viajes. Puedes recargarla en las mismas máquinas expendedoras, kioscos y oficinas mencionados anteriormente.
Es válida para casi todos los sistemas de transporte público en Estambul, incluyendo:
- Metro: Cobertura completa de todas las líneas de metro.
- Tranvía: Utilizable en todas las líneas de tranvía.
- Autobuses: Válida en todas las rutas de autobús, tanto municipales como privadas.
- Metrorail: Utilizable en las líneas de tren ligero y funiculares.
- Ferry: Válida para todos los servicios de ferry de Şehir Hatları.
- Metrobus: Utilizable en la red de metrobus que conecta diferentes partes de la ciudad.
Beneficios de la Istanbul Card
- Descuentos: Cada viaje con la Istanbul Card es más barato que pagar con efectivo. Además, obtienes descuentos adicionales en los transbordos dentro de las primeras dos horas.
- Conveniencia: Evitas la necesidad de comprar billetes individuales cada vez que viajas.
- Recarga Fácil: Puedes recargarla en las máquinas expendedoras, kioscos, o a través de aplicaciones móviles.
Tener una Istanbul Card es indispensable si planeas moverte por Estambul utilizando el transporte público. Facilita el acceso a una red de transporte eficiente y bien conectada, haciendo que tu experiencia en la ciudad sea mucho más cómoda y económica.
Qué actividades puedes hacer en Turquía
Como viajera nómada, Turquía es un destino lleno de experiencias increíbles que no querrás perderte. Aquí te comparto algunas de mis actividades favoritas y por qué las recomiendo:
Visitar Santa Sofía
Santa Sofía en Estambul es simplemente impresionante. Originalmente una catedral, luego una mezquita, y ahora un museo, su arquitectura y la mezcla de historia bizantina y otomana te dejarán sin palabras. La entrada es gratis. No hay nada como caminar por sus grandes pasillos y ver sus mosaicos dorados.
Santa Sofía también tiene una historia única de transformación. Originalmente construida como una catedral ortodoxa, fue convertida en mezquita en 1453 después de la conquista otomana de Constantinopla. Durante este período, se añadieron minaretes y otros elementos islámicos, pero se conservaron muchos de sus mosaicos cristianos.
En 1935, Santa Sofía fue secularizada y convertida en museo por la República de Turquía, reflejando su papel como símbolo de la convivencia de diferentes culturas y religiones a lo largo de los siglos.
En 2020, fue nuevamente convertida en mezquita, pero sigue siendo un monumento abierto a visitantes de todo el mundo, continuando su legado como un puente entre Oriente y Occidente.
Mezquita Azul
Justo frente a Santa Sofía, la Mezquita Azul es otro icono de Estambul. Su nombre proviene de los azulejos azules que adornan su interior. La entrada es gratuita, aunque se agradecen las donaciones. No olvides llevar un pañuelo para cubrirte la cabeza si eres mujer, y respeta los horarios de oración.
Gran Bazar
Perderse en el Gran Bazar es una aventura en sí misma. Con más de 4,000 tiendas, puedes encontrar desde especias hasta joyas. La entrada es gratuita, pero asegúrate de llevar efectivo y prepárate para regatear. Es un lugar perfecto para comprar recuerdos y sumergirte en la cultura local.
Lo impresionante es que, además de ser un laberinto de tiendas y callejuelas, el Gran Bazar ha funcionado como un centro comercial activo durante más de 550 años. Fue construido en 1461, poco después de la conquista de Constantinopla por los otomanos, y se ha mantenido como un vibrante centro de comercio y cultura desde entonces.
En el Gran Bazar no solo encontrarás productos tradicionales y auténticos, como alfombras turcas, joyas y especias, sino que también es famoso por sus réplicas e imitaciones de marcas reconocidas.
Es importante tener en cuenta que, aunque las réplicas y imitaciones pueden parecer tentadoras y ofrecen una opción más económica, no son productos originales. Al adquirir estos artículos, es fundamental estar consciente de que la calidad y durabilidad pueden variar considerablemente en comparación con los auténticos.
Torre de Gálata
Subir a la Torre de Gálata ofrece una de las mejores vistas panorámicas de Estambul. Por unos 20 USD, puedes subir a la cima y disfrutar de una vista de 360 grados de la ciudad. Al atardecer, la vista del Bósforo y el horizonte de Estambul es simplemente mágica.
Mezquita de Ortaköy
La Mezquita de Ortaköy, situada a la orilla del Bósforo, es perfecta para una sesión de fotos. Después de visitarla, puedes disfrutar de una patata rellena (kumpir) en uno de los puestos cercanos. La entrada es gratuita y la zona alrededor de la mezquita es encantadora para pasear.
Crucero por el Bósforo
Un crucero por el Bósforo es una experiencia obligatoria en Estambul. Por unos 8-10 USD, puedes disfrutar de un recorrido que te muestra la ciudad desde una perspectiva diferente, pasando por palacios, fortalezas y mansiones otomanas. Es relajante y ofrece unas vistas espectaculares.
Los tickets para este recorrido los puedes adquirir en las taquillas que están situadas en las orillas del bosforo en el puerto de Uskudar.
Capadocia
Capadocia es un destino de ensueño con sus formaciones rocosas únicas y ciudades subterráneas. Pasear por los valles de Göreme y Uchisar es como estar en otro planeta. Las entradas a los museos al aire libre de la región cuestan alrededor de 8-10 USD.
En Capadocia puedes explorar las ciudades subterráneas como Derinkuyu y Kaymakli, visitar los valles como el Valle de las Chimeneas de Hadas, el Valle Rojo y el Valle de las Rosas.
Tambien puedes recorrer Capadocia en cuatrimoto, también conocidas como ATVs. La experiencia generalmente comienza con una sesión de instrucción breve para asegurarte de que te sientas cómodo manejando el vehículo. Las excursiones en cuatrimoto suelen durar entre 2 y 3 horas
Una advertencia es que el terreno puede ser polvoriento y a veces resbaladizo, así que asegúrate de llevar ropa adecuada que no te importe ensuciar. Además, ten en cuenta que, aunque la mayoría de los operadores ofrecen instrucciones y supervisión, es esencial conducir con precaución para evitar accidentes y disfrutar de la experiencia de manera segura.
Volar en Globo en Capadocia
Si vas a viajar a Turquía, volar en globo aerostático en Capadocia es una experiencia que no olvidarás. Los precios varían, pero suelen estar entre 200 y 300 USD. Volar al amanecer sobre las chimeneas de hadas y los paisajes lunares es una experiencia mágica y altamente recomendada.
El proceso comienza muy temprano, generalmente antes del amanecer, y aquí te cuento cómo suele ser el día:
Primero, te recogen en tu hotel alrededor de las 4:30 o 5:00 de la mañana, dependiendo de la temporada y la hora del despegue. El motivo por el que el vuelo se realiza tan temprano es porque las condiciones meteorológicas son ideales en las primeras horas del día.
Durante el amanecer, los vientos suelen ser más suaves y estables, lo que permite un vuelo más seguro y placentero. Además, la luz suave del sol naciente pinta el paisaje de Capadocia con colores dorados y naranjas, creando una vista espectacular.
Una vez que te recogen, te llevan al lugar de lanzamiento, donde te ofrecen un desayuno ligero mientras observas cómo se preparan los globos. El proceso de inflar el globo puede ser fascinante.
Cuando el globo finalmente está listo y el sol comienza a elevarse en el horizonte, despegas en un viaje que dura entre 60 y 90 minutos, flotando sobre los paisajes únicos de Capadocia, con sus formaciones rocosas y chimeneas de hadas. Al finalizar el vuelo, es común celebrar con una copa de champán y recibir un certificado conmemorativo.
Las Playas de Antalya
Antalya, con sus playas de arena blanca y aguas cristalinas, es un paraíso para los amantes del sol. La Playa de Konyaaltı es gratuita y perfecta para relajarse. También puedes explorar las ruinas de la antigua ciudad de Perge, que tienen un costo de entrada de alrededor de 100 TL (3 USD).
Pamukkale
Pamukkale es famosa por sus terrazas de travertino blanco y aguas termales. Caminar por estas terrazas naturales es una experiencia única. La entrada cuesta unos 350 TL (10 USD) y vale cada centavo. Además, puedes visitar la antigua ciudad de Hierápolis en la misma zona.
Las impresionantes terrazas se formaron por la acumulación de minerales de calcio depositados por las aguas termales que emergen de manantiales en la región. Este fenómeno natural ocurre cuando el agua rica en calcio se enfría al entrar en contacto con el aire, lo que provoca la precipitación de carbonato de calcio.
Con el tiempo, estas acumulaciones forman las terrazas blancas, que parecen un paisaje de hielo congelado.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que, aunque las terrazas de travertino parecen un paisaje de ensueño en las imágenes en internet, la realidad puede ser un poco diferente. Las fotos tienden a capturar las terrazas en su mejor momento, con luz ideal y desde los ángulos más favorecedores.
Al visitarlas, puedes notar que hay áreas con más turistas, o que el color blanco con azul de las terrazas no siempre es tan brillante como en las imágenes. La experiencia es realmente única, pero es bueno tener en mente que la realidad puede no ser tan idílica como las fotos que ves en línea. ¡Aún así, vale la pena la visita por la belleza y la singularidad del lugar!
Piscina de Cleopatra
Dentro de Pamukkale, la Piscina de Cleopatra es una piscina termal donde se dice que la reina egipcia solía bañarse. Por unos 175 TL adicionales (5 USD), puedes nadar en estas aguas ricas en minerales rodeadas de ruinas antiguas. Es una experiencia rejuvenecedora y única.
Playas de Fethiye
Las playas de Fethiye, especialmente la famosa Playa de Ölüdeniz, son espectaculares. La entrada a la playa cuesta alrededor de 35 TL (1 USD). Además, puedes hacer parapente desde el Monte Babadağ para obtener una vista impresionante del mar turquesa. Los precios del parapente varían, pero suelen estar alrededor de 100-150 USD.
Seguro de viaje para viajar a Turquía
Cuando planifico un viaje, especialmente a destinos tan fascinantes como Turquía, siempre me aseguro de tener un buen seguro de viaje. Puede que no sea lo más emocionante de organizar, pero te aseguro que es de lo más importante.
No importa cuán aventurero o experimentado seas, viajar sin seguro es un riesgo que simplemente no vale la pena correr.
En mis viajes, he confiado en Assist 365. Es una sugerencia basada en mi experiencia personal. He utilizado este seguro durante varios años y siempre me ha ofrecido una cobertura confiable y a precios bastante accesibles.
Puedes encontrar planes desde tan solo 10 o 15 USD para varios días, lo que es una inversión mínima si consideras la tranquilidad que te proporciona.
¿Por qué es tan importante el seguro de viaje?
Bueno, primero está la cobertura médica. Imagínate que te enfermas o te lesionas durante el viaje, sin un seguro adecuado, los costos médicos pueden ser altísimos. Turquía, aunque tiene buenos servicios médicos, no es el lugar donde querrías arriesgarte a enfrentar facturas inesperadas.
Otra gran ventaja es la asistencia en emergencias. Viajar por un país nuevo siempre implica ciertos imprevistos, desde retrasos en vuelos hasta pérdidas de equipaje. Tener un seguro significa que hay un equipo listo para ayudarte a resolver cualquier situación complicada que pueda surgir.
Finalmente, la mayor ventaja para mí es la tranquilidad. Saber que estás cubierto ante cualquier eventualidad te permite disfrutar del viaje mucho más. Puedes concentrarte en explorar, descubrir nuevas culturas y sumergirte en las experiencias que Turquía tiene para ofrecer, sin la preocupación constante de lo que podría salir mal.
Cuál es la mejor época del año para viajar a Turquía
Elegir la mejor época para un viaje a Turquía realmente depende de lo que quieras experimentar, ya que cada temporada ofrece algo único. Aquí te comparto un poco sobre cada una para que puedas tomar una decisión informada:
Primavera (marzo a mayo)
La primavera es una de las mejores épocas para viajar aTurquía, especialmente si te encanta el clima suave y agradable. Las temperaturas suelen oscilar entre los 15°C y 25°C, lo que es perfecto para explorar tanto las ciudades como las regiones naturales. Además, los paisajes están llenos de flores en plena floración, lo que hace que tus fotos sean aún más hermosas.
Es una excelente época para hacer turismo en Estambul, visitar Capadocia y explorar la costa del Egeo. Los sitios históricos y las playas comienzan a estar accesibles, pero sin el calor extremo del verano.
Verano (junio a agosto)
Si eres amante del calor y quieres disfrutar del sol en las playas, el verano es para ti. Las temperaturas pueden superar los 30°C en muchas partes del país, especialmente en la región del Mediterráneo y del Egeo. Es la temporada alta para turistas, por lo que encontrarás más actividades y eventos en las ciudades.
Ideal para disfrutar de las playas de Antalya, Fethiye y Bodrum. También es un buen momento para explorar las ruinas antiguas y disfrutar de la vida nocturna. Solo ten en cuenta que las multitudes pueden ser un poco abrumadoras en lugares turísticos populares y que los precios dada a la temporada, pueden llegar a ser más altos que el resto del año.
Otoño (septiembre a noviembre)
El otoño es otra época maravillosa para viajar a Turquía, con temperaturas agradables similares a las de la primavera, que oscilan entre los 20°C y 30°C. La temporada de turismo comienza a disminuir, lo que significa menos multitudes y precios más bajos.
Es una gran oportunidad para explorar las ciudades sin las aglomeraciones del verano. También es un momento excelente para visitar Capadocia y hacer un paseo en globo, ya que el clima es aún favorable.
Invierno (diciembre a febrero)
Aunque el invierno puede ser frío, especialmente en el interior y en las regiones montañosas, también ofrece una experiencia única. Las temperaturas en Estambul y la costa pueden ser más suaves, pero en Capadocia y otras regiones interiores, pueden bajar a bajo cero.
Es la temporada baja, por lo que los precios son más económicos y hay menos turistas. Si te gusta el esquí, puedes visitar las estaciones de esquí en la región de Uludağ. Además, podrás disfrutar de los sitios históricos y culturales con más tranquilidad.
La primavera y el otoño son las mejores épocas si buscas temperaturas agradables y menos turistas. El verano es ideal para los amantes del calor y las playas, mientras que el invierno puede ser perfecto si buscas tranquilidad, precios más bajos y hacer actividades en el hielo con esquiar.
Pagos y dinero en Turquía
Cuando viajas por Turquía, es importante que estés preparada en cuanto a pagos y manejo de dinero. Aquí te comparto mi experiencia personal para que sepas qué esperar y cómo organizarte mejor.
Dinero en efectivo en Turquía
Algo que aprendí rápido es que llevar algo de efectivo es esencial en Turquía. Aunque las ciudades grandes como Estambul, Ankara o Izmir están bien preparadas para los pagos con tarjeta, hay muchos lugares más pequeños y negocios locales donde solo aceptan efectivo. Me pasó en un pequeño café en el Gran Bazar, donde el té con vista a la mezquita terminó siendo una lección en la importancia del efectivo. ¡Por suerte, tenía unos liras en la billetera!
El cajero automático más cercano estaba a un par de calles, y afortunadamente pude sacar dinero con mi tarjeta internacional sin problemas. Eso sí, asegúrate de que tu banco no cobre comisiones muy altas por retirar efectivo en el extranjero, y si es posible, opta por un banco que ofrezca retiros gratuitos o con bajos costos en Turquía.
Pagos con tarjeta en Turquía
Las tarjetas de crédito y débito son ampliamente aceptadas en las ciudades grandes y en muchas zonas turísticas. En restaurantes, tiendas, hoteles y hasta en las estaciones de transporte público, podrás pagar con tarjeta sin problema. Sin embargo, siempre revisa si te están aplicando alguna comisión extra por pagar con tarjeta; en algunos lugares prefieren efectivo y podrían cobrarte una pequeña tarifa adicional.
Una vez, en un mercado de Estambul, quise comprar unos souvenirs y, cuando saqué mi tarjeta, el vendedor me dijo que prefería efectivo, aunque aceptaba tarjetas. Decidí pagar en efectivo para evitar la posible comisión y para facilitarle la vida al vendedor. Además, es una buena manera de negociar un mejor precio.
Cambio de divisas en Turquía
Cuando llegues a Turquía, puedes cambiar dinero en el aeropuerto, pero te recomendaría esperar a llegar a la ciudad para encontrar mejores tasas de cambio. En los centros urbanos y turísticos, hay muchas casas de cambio con tasas bastante competitivas. Solo asegúrate de comparar un par de lugares antes de cambiar una gran cantidad. Yo, por ejemplo, encontré una casa de cambio en el barrio de Sultanahmet que tenía una mejor tasa que las que vi en las zonas más turísticas.
Propinas en Turquía
El tema de las propinas en Turquía es algo a lo que me tuve que acostumbrar, ya que varía un poco dependiendo de dónde estés y del servicio que recibas. En general, las propinas no son obligatorias, pero sí son apreciadas y, en muchos casos, esperadas.
En los restaurantes, dejar una propina es bastante común. Si estás en un lugar más turístico o en un restaurante de nivel medio o alto, lo habitual es dejar entre un 5% y un 10% del total de la cuenta.
Si el servicio ha sido excepcional, puedes dejar un poco más. En los locales más modestos o en los restaurantes pequeños, la propina es menos esperada, pero si dejas unas monedas, siempre será bien recibida.
Algo que aprendí es que en Turquía, la propina se suele dar en efectivo directamente a la persona que te atendió. Si estás en un restaurante, es mejor entregar la propina al camarero en lugar de dejarla sobre la mesa, ya que así te aseguras de que llegue a la persona correcta.
Conectividad en Turquía: Teléfono y Wi-Fi
Mantenerme conectada durante mi viaje por Turquía fue una de mis prioridades. No solo para poder compartir mis aventuras con ustedes a través de mis historias de Instagram o reels, sino también para estar orientada y acceder a toda la información que necesitaba. Afortunadamente, en Turquía, hay varias maneras de mantener una buena conectividad, tanto a través de tu teléfono móvil como por Wi-Fi.
Teléfono móvil: eSIM de Holafly
Uno de los métodos más fáciles y prácticos que encontré para tener conexión a internet en Turquía es usar una eSIM de Holafly. Para mí, fue una solución perfecta porque no tuve que preocuparme por buscar una tienda de SIM local, lo activé antes de llegar y así, desde que aterrizas, ya tienes acceso a internet.
La eSIM de Holafly te permite mantenerte conectado sin necesidad de cambiar la tarjeta SIM física de tu teléfono. Además, no tienes que preocuparte por recargar saldo o buscar planes adicionales, ya que las eSIMs de Holafly vienen con datos ilimitados para que no te falte conexión durante tu viaje.
Y lo mejor es que, como te comparto mi experiencia, puedes aprovechar mi código de descuento, que te dará un 5% de descuento en tu compra. Solo tienes que ingresar mi código al momento de pagar.
Wi-Fi en Turquía
En cuanto a Wi-Fi, Turquía está bastante bien conectada, especialmente en las áreas urbanas y turísticas. En Estambul, Ankara, y otras ciudades grandes, es fácil encontrar Wi-Fi gratuito en cafeterías, restaurantes y hoteles. Incluso en los aeropuertos y algunas estaciones de trenes puedes conectarte sin costo.
Sin embargo, como la conexión Wi-Fi pública puede ser un poco inestable o insegura, sobre todo en lugares concurridos, siempre es una buena idea tener tu propio acceso a internet. Esto es especialmente útil si planeas hacer viajes largos por carretera o explorar áreas rurales como Capadocia, donde la conexión Wi-Fi puede ser limitada o inexistente.
Consejos prácticos
- VPN: Si te preocupa la seguridad al conectarte a redes Wi-Fi públicas, considera usar una VPN. De esta manera, mantendrás tu información personal y tus conexiones más seguras. Aquí te comparto la que yo recomiendo.
- Cargar los dispositivos: Asegúrate de llevar una batería externa, especialmente si vas a estar fuera todo el día, ya que usar el GPS y otras aplicaciones de viaje puede consumir mucha batería.
Mantenerme conectada en Turquía fue sencillo y sin complicaciones gracias a la eSIM de Holafly y a la abundancia de redes Wi-Fi disponibles. Esto me permitió disfrutar de mi viaje con la tranquilidad de poder comunicarme y acceder a la información que necesitaba en cualquier momento.
Información sobre visado para Turquía
Cuando comencé a planear mi viaje a Turquía, una de las primeras cosas que investigué fue el tema del visado. Siempre es mejor tener esto resuelto antes de llegar para evitar sorpresas y disfrutar al máximo desde el primer momento.
¿Necesitas visa para entrar a Turquía?
Depende de tu país de origen. Por ejemplo, si vienes de países como Bulgaria, Corea del Sur, la mayoría de los países de la Unión Europea, o Latinoamérica (como Argentina, Chile o Venezuela), no necesitarás tramitar una visa
Por otro lado, algunos países como México, Australia, y algunos otros de Asia y África, también pueden optar por la e-Visa. Puedes solicitarla desde la comodidad de tu casa en el sitio oficial de la e-Visa turca, y una vez que la pagues (el costo varía según tu nacionalidad, pero ronda entre $20 y $50 USD), la recibes por correo electrónico.
Para quienes no tienen la opción de la e-Visa, es necesario obtener una visa en la embajada o consulado turco antes de viajar. Asegúrate de verificar los requisitos específicos de tu país, ya que en algunos casos también es posible que se te otorgue una visa a la llegada, pero esto es menos común.
Países que NO necesitan visa para entrar a Turquía
Actualmente los ciudadanos españoles pueden entrar en Turquía con el pasaporte o el DNI indistintamente, tan sólo será necesario que la validez sea de al menos seis meses y la estancia en el país no podrá superar los 90 días.
Algunos afortunados, como los ciudadanos de Japón, Andorra, Argentina, Bolivia, Bulgaria, Chile, Corea del Sur, Dinamarca, Ecuador, Venezuela y varios países de los Balcanes, pueden entrar a Turquía sin necesidad de visado y permanecer hasta 90 días por turismo.
Países que necesitan visado (E-visa) para entrar a Turquía
Estancias de hasta 90 días: Australia, Austria, Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Bélgica, Canadá, República Dominicana, Haití, Holanda, Hong Kong (pasaporte británico), Irlanda, Jamaica, Malta, Maldivas, Omán, Portugal, Eslovenia, Reino Unido y Estados Unidos.
Estancias de hasta 60 días: Albania, Bielorrusia, Ucrania y Rusia.
Para estancias de hasta 30 días: Armenia, Azerbaiyán, Bahréin, Estonia, Chipre, Hungría, Jordania, Letonia, Lituania, Moldavia, Noruega, Polonia, Rumanía, Eslovaquia, Tayikistán, Turkmenistán, Serbia y Montenegro.
Mi experiencia con la entrada al viajar a Turquía
En mi caso, el proceso fue sencillo, ya que yo viajo con mi pasaporte español, por lo que no tuve mayor problema para el ingreso al país. Solo necesité mi pasaporte, que debía ser válido por al menos seis meses después de la fecha de entrada a Turquía.
De igual forma, asegurate de revisar la página oficial de la embajada correspondiente para que obtengas información actualizada. Ahora mismo son muchos los paises que están cambiando las políticas de entrada a su territorio.
Seguridad en Turquía
Cuando decidí viajar a Turquía, uno de mis primeros pensamientos fue sobre la seguridad. Había escuchado de todo, desde historias increíbles hasta advertencias sobre posibles estafas y carteristas, pero mi experiencia personal fue bastante tranquila, aunque siempre me mantuve alerta.
En general, me sentí segura en Turquía. Las grandes ciudades como Estambul están bien vigiladas, y hay una fuerte presencia policial en las zonas turísticas. Eso sí, como en cualquier destino, es importante usar el sentido común y estar al tanto de tu entorno.
Estafas en Turquía
En las áreas más turísticas, como el Gran Bazar o las atracciones principales de Estambul, es donde hay que estar más atentos. Por ejemplo, es común que intenten venderte productos a precios inflados, especialmente si pareces extranjero.
Recuerdo haber visitado el Gran Bazar, un lugar fascinante, pero lleno de vendedores que intentan persuadirte de comprar. Aquí, es clave regatear, pero también asegurarte de saber bien lo que estás comprando.
A veces, te ofrecerán artículos que dicen ser de marca, pero que claramente no lo son. En este sentido, siempre es bueno tener una idea del valor real de los productos antes de comprar.
En cuanto a los carteristas, Estambul no es diferente de otras grandes ciudades. Las multitudes en lugares como la Plaza de Sultanahmet o en las estaciones de transporte público son donde más se debe tener cuidado. Por eso, siempre mantengo mi bolso cerca de mi y evito llevar objetos de valor en los bolsillos traseros.
Transporte y Taxis
Otra cosa a tener en cuenta es el uso de taxis. En Estambul, es bastante común que algunos taxistas intenten cobrar de más a los turistas. Me pasó una vez que, sin darme cuenta, tomé un taxi sin taxímetro.
La tarifa al final del viaje fue mucho más alta de lo que debería haber sido. Después de eso, siempre me aseguré de agarrar taxis con taxímetro o usé aplicaciones como BiTaksi, que son más confiables.
Mi experiencia en barrios locales
Cuando me aventuré en barrios menos turísticos, descubrí una Turquía diferente, donde la gente es increíblemente hospitalaria y amable. Me sorprendió gratamente la disposición de los locales para ayudarme, incluso cuando no hablaban inglés. Aquí, la seguridad fue lo último que me preocupó; me sentí bienvenida y cuidada.
Consejos para mantenerte seguro
- Evita mostrar objetos de valor en público. Si llevas cámaras, smartphones o dinero, mantenlos guardados cuando no los necesites.
- Regatea con cuidado y asegúrate de estar comprando productos auténticos si eso es lo que buscas.
- Confirma siempre el precio de antemano cuando tomes un taxi o compres algo que no tenga un precio fijo.
- Ten cuidado con tus pertenencias en lugares concurridos y no dejes tus bolsas colgadas de la silla en restaurantes.
Vestimenta en Turquía: Consejos y Recomendaciones
Antes de mi primer viaje a Turquía, me preguntaba cómo debía vestirme, especialmente al visitar lugares religiosos como mezquitas. Turquía es un país fascinante en cuanto a su mezcla de tradiciones y modernidad, y eso se refleja también en la vestimenta. Aquí te comparto mis experiencias y algunos consejos para que te sientas cómoda y respetuosa durante tu visita.
En las calles de Turquía
Turquía es un país bastante diverso, y la vestimenta varía dependiendo de la región en la que te encuentres. En Estambul, por ejemplo, te darás cuenta de que la moda urbana es bastante moderna, similar a la de cualquier gran ciudad europea. Verás a mujeres usando de todo, desde vestidos y faldas hasta jeans y camisetas, así que no te preocupes demasiado por encajar.
Sin embargo, siempre es una buena idea optar por ropa que cubra los hombros y las rodillas, especialmente si planeas visitar zonas más conservadoras o rurales. Yo siempre me sentí cómoda usando pantalones largos ligeros y blusas con mangas cortas o largas.
Al visitar mezquitas
Las mezquitas en Turquía son absolutamente impresionantes y, para mí, una visita obligada. Sin embargo, al ser lugares sagrados, hay algunas reglas de vestimenta que es importante seguir para mostrar respeto.
Para las mujeres, es necesario cubrirse el cabello, los hombros y las piernas. Yo siempre llevo un pañuelo ligero en mi bolso, que es fácil de poner y quitar según lo necesite. Si no tienes uno, no te preocupes: la mayoría de las mezquitas te prestan un pañuelo o una falda larga al entrar. Asegúrate de que tu ropa no sea demasiado ajustada o transparente. Opta por una falda larga o pantalones y una blusa de manga larga.
Para los hombres, es más sencillo. Los pantalones largos son obligatorios, y también es preferible una camisa o camiseta que cubra los hombros. En algunas mezquitas, vi a hombres que fueron invitados a ponerse una túnica si llevaban pantalones cortos.
Al entrar, deberás quitarte los zapatos. Algunas mezquitas te proporcionan bolsas plásticas para que los lleves contigo. Es un buen detalle llevar calcetines en buen estado, ya que caminarás descalza o en calcetines por el interior de la mezquita.
En la playa o en zonas turísticas
En las zonas costeras, como Antalya o Fethiye, el ambiente es mucho más relajado. Aquí, puedes usar tu bikini o traje de baño sin problemas en las playas y piscinas de los hoteles. Sin embargo, fuera de la playa, es más respetuoso cubrirse un poco más, por lo que un pareo o un vestido playero son opciones perfectas.
Comida Típica en Turquía
La gastronomía turca es una de las cosas que más me sorprendió en mis viajes por el país. Cada comida es una explosión de sabores, y hay tantas opciones deliciosas que es imposible aburrirse.
Aquí te comparto algunos de mis platillos favoritos que no puedes dejar de probar si visitas Turquía.
Menemen
El menemen es un desayuno clásico turco que se ha convertido en uno de mis platos preferidos para empezar el día. Es una mezcla de huevos revueltos con tomates, pimientos y cebolla, todo cocido en una sartén con un toque de aceite de oliva.
A veces también le agregan queso o salchicha. Es sabroso, reconfortante y perfecto para mojar con un buen pedazo de pan crujiente. Lo que más me gusta es que es ligero, pero al mismo tiempo te deja satisfecha para un día lleno de aventuras.
Kokoreç
El kokoreç es uno de esos platillos que debes probar al menos una vez, aunque no sea para todos los gustos. Se trata de un bocadillo hecho con intestinos de cordero, condimentados y asados a la parrilla, luego picados en trozos pequeños y servidos en pan crujiente.
Suena peculiar, lo sé, pero el sabor es intenso y especiado, con una textura crujiente por fuera y tierna por dentro. Es una comida callejera muy popular, especialmente en las noches.
İskender
El İskender es otro de esos platos que me dejó enamorada. Se trata de finas láminas de carne de cordero o ternera, colocadas sobre trozos de pan pita, bañadas en una rica salsa de tomate y mantequilla derretida, y acompañadas con una cucharada generosa de yogur.
Es una bomba de sabores: la carne es tierna, el pan absorbe todo el jugo, y el yogur le da un toque refrescante. Es perfecto para una comida completa y abundante, especialmente después de un día de exploración.
Börek
El börek es un clásico de la cocina turca que nunca falla. Es un pastel hecho con capas de masa filo rellenas de queso, espinacas, carne o patatas. Hay diferentes tipos de börek, y cada uno tiene su propio encanto.
Personalmente, me encanta el de queso, con su mezcla de texturas crujientes y suaves. Es ideal para un almuerzo rápido o para picar algo mientras exploras los bazares de la ciudad.
Baklava
Ningún viaje a Turquía está completo sin probar el baklava. Este dulce es una obra maestra de la repostería turca, hecho con capas de masa filo, relleno de nueces y pistacho y bañado en almíbar de miel.
Es extremadamente dulce, así que prepárate para una explosión de azúcar. El baklava es perfecto para acompañar un café turco y es uno de esos postres que no puedes dejar de comer una vez que empiezas.
Midye Dolma
Las midye dolma son mejillones rellenos de arroz especiado, piñones y pasas, y luego cocidos al vapor. Se suelen servir con un chorrito de limón. La primera vez que los probé fue en un pequeño puesto en la calle y desde entonces se han convertido en uno de mis snacks favoritos. Es un plato sencillo pero lleno de sabor, y muy típico de las zonas costeras de Turquía.
Yaprak Sarma
Los yaprak sarma son hojas de parra rellenas de arroz, piñones y especias. Es un plato que se sirve frío y es un excelente aperitivo o acompañamiento. Lo que más me gusta es su sabor agridulce y su textura suave. Son como pequeños bocados llenos de sabor y perfectos para compartir.
Köfte
Los köfte son albóndigas o hamburguesas hechas de carne picada, generalmente de cordero o ternera, mezcladas con cebolla, ajo y especias. Se sirven de muchas formas diferentes: a la parrilla, fritas, en salsas, o en sándwiches.
Son sencillas pero sabrosas, y son un plato común en las comidas familiares turcas. Siempre son una apuesta segura cuando no sabes qué pedir.
Ayran
El ayran es una bebida que los turcos adoran, y al principio puede resultar un poco peculiar para los extranjeros. Es una mezcla de yogur, agua y sal, y se sirve bien fría. Lo curioso es que es la bebida perfecta para acompañar cualquier comida, especialmente aquellas que son más pesadas o picantes.
Café Turco
El café turco es más que una bebida, es toda una experiencia. Es fuerte, espeso y se sirve en pequeñas tazas, con un sabor y aroma únicos que provienen de la forma en que se prepara, hirviendo el café finamente molido con agua y azúcar en una cafetera especial llamada cezve.
Es ideal para después de una comida, y los turcos suelen acompañarlo con un dulce como el baklava. Además, se dice que después de beberlo, se puede leer la fortuna en los posos que quedan en la taza, lo cual es un detalle interesante de la cultura turca.
Aceitunas y yogur en cada comida
Una de las cosas que noté rápidamente es que los turcos acompañan casi todas sus comidas con aceitunas y yogur. Las aceitunas, ya sean verdes o negras, están presentes en el desayuno, el almuerzo y la cena. Tienen un sabor fresco y ligeramente amargo que complementa perfectamente los platos más pesados.
En cuanto al yogur, es omnipresente en la cocina turca. Se sirve como acompañamiento para platos de carne, se usa en salsas, y también es la base del ayran. Los turcos creen que el yogur es muy saludable, y después de probarlo de tantas maneras, ¡estoy de acuerdo!
Turquía es un paraíso gastronómico y estas son solo algunas de las delicias que puedes encontrar. Cada plato cuenta una historia y es una ventana a la rica cultura del país. ¡No dudes en aventurarte y probarlos todos!
¿Por qué en Turquía no se come cerdo?
Cuando llegué a Turquía, una de las primeras cosas que noté al explorar la gastronomía local es que el cerdo prácticamente no aparece en los menús. No es que me sorprenda, porque sabía que Turquía es un país de mayoría musulmana, pero siempre es interesante entender el «por qué» detrás de estas costumbres.
En el Islam, la religión predominante en Turquía, el cerdo se considera haram, lo que significa prohibido. Esto está basado en las enseñanzas del Corán, el libro sagrado del Islam, que prohíbe el consumo de carne de cerdo porque se considera impura.
Por esta razón, la carne de cerdo no forma parte de la dieta diaria de los turcos, y en su lugar, se utilizan otras carnes como el cordero, la ternera, y el pollo, que son halal, es decir, permitidas.
A lo largo de mis viajes por Turquía, me he dado cuenta de que la ausencia de cerdo no es un problema en absoluto. Hay tantas otras opciones deliciosas que, sinceramente, no lo echo de menos.
La comida aquí es rica, variada y llena de sabor, con un enfoque en ingredientes frescos y una gran cantidad de especias y hierbas que hacen que cada plato sea una experiencia en sí mismo.
Además, es importante ser respetuosos con las costumbres y tradiciones del lugar que estás visitando. Así que, si estás en Turquía, ni te preocupes por el cerdo, porque vas a encontrar muchísimas otras delicias para disfrutar. ¡Y quién sabe! Tal vez descubras nuevos sabores que se conviertan en tus favoritos.
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